La carrera por el preciado galardón es cosa de dos: entre Lamine y Dembélé saldrá el ganador, pero quién tuvo mejor temporada, cuál de los dos es más decisivo y qué criterios pesan más en la elección.
El debate está abierto y parece cosa de dos: entre Lamine Yamal y Ousmane Dembélé saldrá el próximo ganador del Balón de Oro.
La carrera por el preciado galardón tiene a dos competidores que se fugaron del pelotón, uno de ellos, el juvenil del Barça, que hasta hace algunas semanas no figuraba entre los candidatos.
Atrás quedaron Mohamed Salah, Rapinha, Robert Lewandowski, Kylian Mbappé, Pedri y Lautaro Martínez, aunque con certeza uno de ellos completará el podio de los tres finalistas.
Para no variar, este año de nueva cuenta se perfila una decisión polémica, pues mientras el francés tuvo la mejor temporada de su carrera en el PSG conquistando el triplete —Liga, Copa y Champions—, sin lesiones de consideración en el camino, la joya de La Masía tiene encantado al mundo del futbol que, prácticamente por unanimidad, ya lo considera el mejor futbolista del planeta.
Cabe recordar que la elección del Balón de Oro recae en un nutrido grupo de periodistas —180— que toman en cuenta criterios como rendimiento individual (goles, asistencias), influencia en los partidos, títulos, influencia del jugador en éstos, capacidad de marcar diferencia y Fair Play, entre otros.
Por ello la designación del ganador no suele dejar contento a todo el mundo, debido a que las estadísticas no son 100 por ciento determinantes. Basta recordar el año pasado cuando el mediocampista Rodri Hernández superó a Vinícius, con todo y que desde luego que no hizo más goles ni dio más asistencias que el brasileño.
A falta de la Nations League —España y Francia se enfrentan este jueves y los dos contendientes se verán las caras— y el Mundial de Clubes, Lamine y Dembélé tienen números individuales relativamente parejos.
El español de 17 años ha disputado 55 partidos en los que marcó 18 goles y repartió 25 asistencias, es decir, ha participado en 43 anotaciones; en tanto Ousmane jugó 49 encuentros con 33 tantos y 15 pases. Aquí cabe aclarar que la Ligue 1 se considera que está al menos un escalón abajo en cuanto a nivel con respecto a LaLiga.
En La Liga al Día analizamos al campeón de la temporada 2024/25.
A final de cuentas esos números pasarán a segundo plano porque las votaciones son subjetivas, ya que, ¿quién puede determinar con precisión cuál de los dos es más decisivo?
Además, la experiencia dicta que los periodistas que eligen tienen a sus clubes y jugadores favoritos, y bajo esas convicciones ejercen sus votos.
En dos meses se darán a conocer de forma oficial los candidatos para el Balón de Oro y la gala se llevará a cabo el 22 de septiembre…
Dembélé no tiene ni cerca el impacto de Lamine que juega en un club gigante y que en los inicios de su carrera ya se metió en la conversación sobre si es o no el mejor del mundo.
Aunado a que en el comparativo directo de cualidades, constancia, talento, crecimiento, inteligencia y aporte colectivo, también es superior el chaval de La Masía.
En resumen, esta carrera de dos la debería ganar el futbolista que ha provocado que exista cierto consuelo ante el cada vez más cercano retiro de Messi… Y ese futbolista es nada menos que aquel bebé que recibió, sin saberlo ni pedirlo, el bautizo del genio argentino.