Grandes Ligas suspende un juego a timoneles Mike Shildt, de Padres, y Dave Roberts, de Dodgers, y al lanzador Robert Suárez, de San Diego
LOS ÁNGELES -- El cerrador de los San Diego Padres, Robert Suárez, fue suspendido por tres juegos y multado con una cantidad no revelada el viernes por golpear intencionalmente a Shohei Ohtani, de Los Ángeles Dodgers, con un lanzamiento durante el tenso encuentro de los rivales de la División Oeste de la Liga Nacional el jueves por la noche.
Suárez apelará la suspensión, lo que le permitirá seguir jugando con San Diego el viernes por la noche contra Kansas City Royals.
Los mánagers de los Padres, Mike Shildt, y de los Dodgers, Dave Roberts, también recibieron suspensiones de un juego y multas no reveladas por su participación en el altercado ocurrido en ambas mitades de la novena entrada durante la victoria de los Padres por 5-3 en el Dodger Stadium.
"La apoyo", dijo Roberts sobre la decisión disciplinaria de la liga. Creo que, obviamente, nunca quiero que el juego gire en torno a los mánagers. No debería ser así. Debería girar en torno a los jugadores y a ganar, así que anoche, ambos mánagers protegieron a sus equipos, y desafortunadamente llegó al punto de convertirnos en el centro de atención, y así no debería ser”.
Ambos mánagers fueron expulsados en la alta de la novena entrada tras correr al campo y chocar durante una acalorada discusión que casi se volvió aún más violenta antes de que sus jugadores y coaches asistentes intervinieran.
Shildt creía que el relevista de los Dodgers, Jack Little, golpeó intencionalmente a Fernando Tatís Jr. en la mano derecha con un lanzamiento, lo que desencadenó el último incidente de vaciamiento de bancas entre rivales locales con varios años de historia de mal carácter.
“Las circunstancias fueron realmente difíciles en esta última serie, y al final del día no me arrepiento de haber defendido a un hombre que amo como Tati, a un equipo que amo y a una ciudad que amo”, dijo Shildt. “En ese sentido, no me arrepiento de cómo llegamos a ese punto. De nuevo, todos podemos tener nuestros comentarios, opiniones y teorías. Pero en cuanto a mis acciones, no es algo que uno quiera hacer todas las noches ni que deba repetirse, ojalá nunca más. Pero se tomaron las medidas adecuadas para las circunstancias, y no me arrepiento en absoluto”.
Shildt y Roberts cumplirán sus suspensiones el viernes. El coach de banca, Danny Lehmann, dirigirá a los Dodgers contra los Washington Nationals, y el coach de banca de los Padres, Brian Esposito, dirigirá el dugout de San Diego.
En la baja de la novena, Ohtani recibió un golpe en la parte posterior del hombro derecho por un lanzamiento de Suárez, lo que puso la carrera del empate en base durante la remontada de tres carreras de los Dodgers. Los compañeros de Ohtani parecían estar preparándose para invadir el campo por segunda vez, pero Ohtani les hizo señas para que se retiraran. El tres veces Jugador Más Valioso se dirigió entonces al dugout de los Padres para charlar un rato, calmando la tensión.
El viernes, Suárez insistió en que no había tomado represalias contra Tatís Jr.
“Nunca intenté meter a nadie en problemas ni golpear a nadie”, dijo Suárez a través de un intérprete. “Desafortunadamente, sucedió. Me expulsaron y no pude terminar el juego, pero ganamos como equipo y pudimos salvarlo… (Los Dodgers) tienen derecho a su opinión. Pueden decir lo que quieran. Ese no fue el caso. Yo estaba ahí para intentar salvar el juego”.
Ohtani lanzó una sesión de bullpen como estaba programado el viernes, a pesar de ser golpeado por Suárez en el hombro de lanzar. Se espera que la segunda apertura de Ohtani en el montículo con los Dodgers se realice el domingo, dijo Roberts.
Tatís Jr. estuvo en la alineación de los Padres como de costumbre el viernes. Manny Machado dijo después que los Dodgers deberían “rezar” para que Tatís Jr. no sufriera una lesión grave, animándolos a “apagar una vela”.